• Se detectará a quienes no sean ciudadanos de este país
MIAMI, 20 DE AGOSTO DE 2012, NHR.com–The News Service of Florida anunció desde Tallahassee que la Florida logró acceso a una base de datos del gobierno federal para detectar a quienes no son ciudadanos y depurar las listas de votantes, según declaró el secretario de Estado, Ken Detzner.
La declaración de Detzner se basa en un memorando de entendimiento del Departamento de Seguridad Nacional federal donde se manifiesta que permitirá al estado continuar la limpieza de las listas, usando el Programa Sistemático de Verificación de Extranjeros (SAVE, siglas en inglés).
Eso reemplazará al sistema estatal que depende de las licencias de conductor y el registro de votantes que había dejado de usarse debido a que los críticos dijeron que estaba lleno de errores,
Detzner dijo que “tenemos la obligación de asegurar que las listas de votantes de Florida sean exactas y el acceso a la base de datos SAVE aumenta mucho nuestra capacidad para lograr esa meta, además de asegurar la integridad de nuestras elecciones”.
La decisión es un revés para quienes se oponían a la depuración y que habían apelado a una serie de demandas judiciales para evitar la depuración de votantes inelegibles.
El estado distribuyó esta lista entre las autoridades electorales de los condados desde abril. Pero muchos condados dejaron de utilizarla después de que encontraron más de 500 personas que eran ciudadanos.
La lista sí permitió el procesamiento judicial de un canadiense acusado de registrarse ilegalmente y votar en el condado Broward.
El Estado había detenido el proceso de la lista inicial, con 2.600 nombres, luego de que supervisores locales de elecciones dijeron que muchas de esas personas en realidad eran elegibles. Detzner dijo que esos 2.600 nombres serán verificados con los datos de SAVE.
El juez federal Robert Hinkle había rechazado en junio la solicitud del Departamento de Justicia federal para que se prohibiera al estado seguir adelante con la depuración. Pero el magistrado dijo también que eran significativas las preocupaciones de que votantes elegibles fueran eliminados de las listas.
Hinkle dijo que Florida podía continua la eliminación de las listas de quienes no eran ciudadanos hasta 90 días antes de una elección federal, despejando el camino para algún tipo de depuración, especialmente si el estado lograba acceso a SAVE.
Los críticos reaccionaron diciendo que, incluso con el acceso a SAVE algunos votantes legítimos podrían ser eliminados de las listas.
Ben Hovland, abogado sénior de la Red Legal de Elecciones Justas, dijo que “Florida no ha informado sobre el proceso que usará en la revisión de las listas de votantes y el uso del programa SAVE para verificar la ciudadanía. Lo que si sabemos es que Florida tiene una lista de errores en el control de las listas que han amenazado el derecho al voto de miles de floridanos”. La purga de votantes podría costarle a Florida miles de dólares debido a que el estado tendrá que pagar al gobierno federal 50 centavos de dólar por cada nombre que revise en la base de datos migratoria.