• Los que no paguen a tiempo podrían ser auditados e investigado por la Inspectora General
MIAMI 2 DE SEPTIEMBRE DE 2014, nhr.com—Concesionarios del Aeropuerto Internacional de Miami que no cumplan con su promesa de pago a Miami Aviation tendrán que pasar por una auditoria y hasta por una investigación de parte de la oficina del Inspector General para determinarse si existe un caso criminal, según las conclusiones de la reunión del comité de Transporte y Aviación celebrada ayer.
El Presidente de dicho Comité Dennis Moss se mostró muy preocupado por el número de concesionario que están atrasados en sus pagos y por tal incluyó en la reunión de ayer como un “asunto especial” la presencia de la Inspectora General Mary T. Cagle, a la Auditora Cathy Jackson y al personal del la dirección de MIA.
De acuerdo con la inspectora General, Cagle, muchos de los concesionarios morosos al son investigados y sorprendidos con la deuda, dicen “bien me pillaron, yo voy a pagar, pagan y nada pasa, continúan con su negocio”, pero de acuerdo con la IG, “debe haber una penalidad para estas personas”, dijo.
La oficina de la auditora realizó en los últimos meses 6 investigaciones a 6 concesiones, ninguna habían reportado las cifras correctas, y el aeropuerto pudo recuperar poco más de un millón de dólares según dijo Cathy Jackson.
A preguntas del comisionado Jean Monestime, Jackson confirmó que Aviation Department tiene una entrada anual de $400 millones de dólares.
“Necesitamos ser más estricto con los concesionarios”, dijo Jackson ante el comité, “hay que cambiar la cultura existente y eliminar la impunidad y castigar a los que no cumplan con sus obligaciones”.
A preguntas del comisionado Bruno Barreiro sobre cuál era el método de investigar a los concesionarios, Cathy Jackson señaló que, “Miami Aviation determina cual es el caso, si cree que pudiera ser de implicación criminal notifica al Inspector General”, dijo, pero si el IG necesita auditar a una determinada empresa nos notifican a nosotros”, dijo.
El Presidente del comité Dennis Moss quiso la opinión de las dos expertas y solicitó que les diera una idea de cual fuera el castigo que recibiera el que se atrase en los pagos, Cathy Jackson fue bien clara, “creo que el que se haya atrasado con una justificación verdadera debe pagar un interés por la deuda atrasada, pero si algún concesionario se demora con objetivos premeditados, simplemente debemos cancelar el contrato y no hacer negocios con ellos, y si existe casi criminal acusarlos”.