MIAMI 9 DE ABRIL DE 2015, nhr.com—Seis individuos fueron acusados en Miami de participar en un esquema de fraude hipotecario internacional, según anuncio la oficina del fiscal para el distrito sur de la Florida.
El presunto esquema está centrado en la compra de viviendas en los condados Miami Dade y Palm Beach consiguiendo préstamos hipotecarios fraudulentos.
Los acusados estuvieron involucrados en la aplicación de al menos $ 9 millones de dólares en préstamos de hipotecas, según cuenta en los documentos de la acusación.
El gran jurado emitió el encausamiento el pasado mes de febrero, pero no fue hasta esta semana que fue abierto y dado a conocer detalles del caso.
Los acusados son, Raúl Enrique Quintana, Evelyn Lara, Luis Enrique Sosa y Juan Oziel González, además los ciudadanos brasileños, Maura Quintana y Arnaldo Almeida Prado Neto.
Según cuenta en los registros de la corte, el fraude comenzó a funcionar a partir de octubre del 2004 hasta mayo del 2007 y fueron usados los bancos Chevy Chase, JP Morgan Chase Bank y Washington Mutual.
Los Quintanas y Prado Neto compraron propiedades residenciales con préstamos hipotecarios obtenidos presentando presuntamente documentación falsa, según cuenta en el encausamiento.
Las empresas, Brickell Finalcial Corp y de la que Raúl Quintana fue presidente y director, Title Closing Partners of Brickell LLC donde Maura Quintana era gerente y Lara y Raúl Quintana aparecían como funcionarios y Cellular & Wireless Wholesale Corp propiedad de Luis Sosa son mencionadas en el encausamiento.
En algunos documentos de los prestamos, Maura Quintana y Arnaldo Almeida Prado afirmaban ser empleados de la compañía de celulares, dice la acusación, mientras que Juan Oziel González era un empleado del Banco Wachovia ahora Wells Fargo durante los años en que se cometía el fraude, y de acuerdo a el documento acusatorio, el daba falsos documentos de verificación de depósitos de las cuentas que figuraban en los documentos de préstamos hipotecarios de los Quintanas.
El abogado David Garvin que representa a Arnaldo Prado, dijo en unas declaraciones escritas que su cliente “es inocente y que se ha cometido un error terrible, y está ansioso de restaurar su buen nombre y reputación”.
Los fiscales dicen que si los acusados son hallados culpables, todas las propiedades serán confiscadas inmediatamente.