MIAMI, nhr.com—Según hemos podido conocer, la famosa Operación Lucky Seven, realizada el pasado año por la policía de Miami, ha quedado en el olvido; al menos eso piensa la fiscalía de Miami-Dade, que dice que hasta el momento no han recibido las principales evidencias, incluyendo los reportes hechos el día de los arrestos y confiscaciones, recibos del buró de propiedades, inventarios de las máquinas y fotos de la operación.
Fuentes allegadas a la fiscalía, nos informan que los fiscales no están muy impresionados con la operación.
“Los fiscales nos dijeron que esta operación no ofrece nada nuevo, además en el pasado hemos investigado redadas similares y no hemos llegados a nada”.
En el año 1991 agentes de la policía de Miami confiscaron más de 300 máquinas de juego en el área de la Pequeña Habana para más tarde una decisión de la corte rechazar la operación. A la Ciudad de Miami le costó pagar millones de dólares en daños.
La operación Lucky Seven, fue llevada a cabo por la alta jefatura de la policía, encabezada por el Comandanter Alfredo Álvarez, jefe de la Unidad de Seguridad Interna, que estuvo a cargo de las unidades que participaron en la redada. Fuentes dentro de la policía señalan que desconocen cómo Álvarez fue asignado a esta operación si estaba al frente de “Asuntos Internos”.
