MIAMI 28 DE MAYO DE 2019, — La lentitud con la que opera el personal de aduana en frontera Talismán que divide Guatemala de Mexico, genera caos vial en la carretera federal donde muchos transmigrantés esperan estacionados para poder continuar con el procedimiento administrativo y poder seguir hacia su país centroamericano como destino final.
Los residentes de las colonias cercanas y choferes que se dirigen a esos países están quejándose por el prácticamente desorden que existe allí.
De uno a dos días tienen que esperar los migrantes que han sido rechazados por México y Estados Unidos algo que les genera mayores gastos, además del riesgo que por las noches les roben sus pertenencias o bien generar percances viales como comúnmente suele pasar ante la falta de intervención de vialidad y policía del municipio de Tuxtla Chico, donde recientemente el procurador acusó a la alcaldesa Deysi González por falsificación de firmas.
De acuerdo con testigos en el lugar, “se observa no solo el riesgo que conlleva transitar por la vía de acceso a la frontera Talismán, sino el desorden que no se ha podido atender por parte de la autoridad local, como de la policía federal quién tiene como competencia directa esta carretera”, dijo una fuente.
A su vez el transporte público que siempre maneja a acceso de velocidad se mete sin importar que pueda provocar un percance, tramitadores y vendedores ambulantes caminan sin pena alguna como si pasearan por alguna plaza, por lo que los automovilistas particulares exigen orden en esta zona.
“Nosotros nos quedamos parqueados en un carril porque no hay para donde caminar, si nos proporcionaran un lugar nos moveríamos ya que la autoridad aduanera es la que tarda mucho para trabajar, si uno no afloja un billete mucho menos que se pase luego”, agregó José Vargas uno de los transmigrante.
