MIAMI 20 DE JUNIO DE 2019, — Luego de casi nueve meses de reclamos sociales y protestas de los sectores productivos por temas como la inseguridad y los problemas que trajeron consigo los flujos de migrantes a la frontera sur, en las últimas horas por fin llegó la Guardia Nacional a Tapachula y de inmediato empezó a poner orden en el municipio.
Por la mañana, comandos de la Armada de México y otras unidades arribaron al centro de la ciudad con decenas de militares, policías federales y de la Guardia Nacional, quienes acompañaron a personal del Instituto Nacional de Migración (INM).
Ante la mirada de asombro de comerciantes, obreros y hasta de los manifestantes que se encuentran en plantón afuera de la Presidencia Municipal, se inició un gran operativo en la que los elementos se desplegaron en las calles aledañas al Parque Central “Miguel Hidalgo”.
En silencio, los militares armados solamente con escudos antimotines fueron adoptando posiciones en todo ese sector, aunque algunos jóvenes con rasgos de centroamericanos lograron huir despavoridos en varias direcciones. También se retiraron de inmediato un grupo de “gestores”, “líderes sociales” y hasta “defensores de los derechos humanos” que se encontraban en esos momentos con los extranjeros.
A otros ya no les dio tiempo de nada. Los agentes migratorios les pidieron algún documento con el que pudieran acreditar su legal estancia en el país y tuvieron que aceptar que habían ingresado de manera ilegal a México.
Por lo pronto no se sabe el total de los asegurados, pero la gran mayoría de ellos se reservaba dar sus nombres y países de origen.
Por lo mismo se desconoce si tienen antecedentes penales o alguna orden de localización. Todos fueron trasladados en varias unidades hacia la Estación Migratoria “Siglo XXI”, al norte de la ciudad, donde conocerán su situación jurídica y, muy probablemente, sean deportados en las próximas horas.
En cuestión de minutos había sido desalojado el centro de la ciudad de migrantes que deambulaban de un lado a otro, incluso algunos consumiendo enervantes.
El operativo se trasladó después al malecón del río Coatán y hacia otros puntos donde había sido denunciada la presencia de migrantes y el aumento considerable de delitos con la participación de extranjeros indocumentados, incluyendo a miembros de bandas delictivas como la Mara Salvatrucha o la Barrio 18.