MIAMI 2 DE OCTUBRE DE 2020, — En Florida la batalla de los republicanos es para atraer a todos los votantes hacia su terreno y siguen gastando mucho en el impulso de traer entre ellos a los votantes judíos en las elecciones de este año.
Ayer se pudo conocer que se realizó una compra por más de $3 millones por parte de la Coalición Judía Republicana, un gasto centrado en los ricos estados de miami-Dade, Broward y los condados de Palm Beach, ricos en votantes del sur de Florida.
Dos anuncios de treinta segundos se emitirán, tanto en las emisoras de radio como las de cable, según nuestras fuentes.
Uno de los comerciales políticos fue titulado “el negocio del siglo”, emplea un tema con un estilo de dibujo para impulsar un argumento de culpa por asociación contra el nominado demócrata Joe Biden.
El anuncio se le inserta a Biden en la boca las imágenes de las izquierdistas, representante Alexandria Ocasio-Cortez e Ilhan Omar y el senador Bernie Sanders, este último de los cuales ha demostrado ser una asociación tóxica entre los votantes del sur de Florida.
Ellos presionaran a Biden, dice la narración, al “aumentar los impuestos, desfinanciar a la policía, presionar a Israel y más”.
Luego un enloquecido narrador, para cerrar el comercial dice, “este acuerdo, como sus políticas, son una locura”.
Trump como “es el presidente más pro-Israel de nuestra historia”.
Necesitamos un líder que luche y sepa hacer la paz”, afirma el narrador.
El RJC está “gastando mucho dinero a nivel nacional para llegar a los votantes judíos”, dijo una fuente de la coalición.
La compra del sur de Florida, dijo, es el “mercado correcto” para ese tipo de alcance, especialmente dados los recientes avances para los candidatos republicanos entre los demográficos.
Bien señala que mientras que Trump obtuvo sólo el 27% de los votos judíos hace cuatro años, el gobernador Ron DeSantis vio una ganancia de ocho puntos con ese número.
“Soy optimista sobre las perspectivas del presidente”, dijo la fuente, señalando el “historial” de Movimientos de políticas favorables a Israel, como trasladar la Embajada de Estados Unidos a Jerusalén y su papel en dos acuerdos de paz regionales clave.
