MIAMI 18 DE FEBRERO DE 2021, NHR.COM—La vimos en Telemundo 51, ella es una expresa política cubana que ha luchado, primero en Cuba y después en el exilio, Ana Lazara Rodríguez aun sigue luchando a pesar de sus 82 años de vida.
Ahora se esta enfrentando al poderoso sistema bancario de Estados Unidos, que, aunque existe una moratoria para ejecuciones de hipotecas por el COVID-19, hay instituciones bancarias que siguen imponiendo sus programas de desalojos.
Este es el caso que enfrenta Ana Lazara según conto a la reportera que la entrevistó, ella sufrió casi 20 años como presa política en Cuba, “y no esperaba pasarse en esta etapa de su vida luchando por salvar la vivienda que compro hace años”, dijo.
Ana Lazara a los 21 años fue condenada en Cuba a 30 años de prisión por actividades contra la revolución, de esos cumplió 19 y después al exilio.
Con mucho trabajo a los pocos años de estar en Miami logró comprar su casa en el corazón de la Pequeña Habana, pero fue engañada por el banco que tomo la hipoteca, poniéndola en una que, en vez de rebajar, cada mes aumentaba la deuda y por consiguiente cada año aumentaba el pago del “mortgage”.
Hoy, a los 82 años, los bancos quieren desalojarla de su casa, una disputa hipotecaria que comenzó en 2009, y ya la casa ya fue vendida a una mujer en California, ella promete luchar hasta el último minuto por no perder su hogar.
“Es muy triste a mis 82 años, y después de haber pasado tanto que todavía tenga que seguir luchando”, dice con dolor Ana Lazara Rodríguez.
Ella dice que la única esperanza que le queda a vivir en este país que es el único en el mundo que una persona pobre puede ganarle a un banco.
El comisionado Alex Diaz de la Portilla la visitó esta semana para ofrecerle apoyo por parte de le ciudad de Miami.
Ana Lazara dice que no sabía que su préstamo era uno que se denomina un “préstamo predatorio”, lo que hace que los pagos aumentaban, así como la cantidad que ella debía.
Un abogado, Bruce Jacobs, la está ayudando, él explica que con ese tipo de préstamos después de unos años el pago era tan alto que era imposible pagarlo y dice que además descubrió que en el caso de Ana Lazara la hipoteca fue vendida de un banco a otro y descubrió que hubo fraude al iniciar la demanda en su contra. El fraude es evidente según el abogado y cree que por eso todavía hay esperanza.
Un juez ha fijado una audiencia para el próximo 26 de febrero si prueban que hubo fraude, la esperanza de quedarse en esa vivienda pudiera ser una realidad.
