• La General Motors y los Navy Seals le salen al paso a declaraciones  vertidas por el mandatario en su campaña de reelección

MIAMI, 4 DE MAYO DE 2012, NHR.com—Nadie l esperaría, pero está ocurriendo. Los reveses para el presidente Obama continúan, mientras la nación espera por conocer más sobre quien acompañaría al candidato republicano Mitt Romney para la postulación presidencial por el Partido Republicano.

Después que el primer mandatario estadounidense se jactara de haber salvado a la General Motors de cerrar para siempre sus puertas, ha sido el propio presidente de esa empresa, Daniel Akerson, quien le acaba de declarar a la revista Newsmax que tanto Obama como el ex presidente George W. Bush tienen el crédito del éxito obtenido en los últimos años por la industria automovilística.

En una entrevista exclusiva con el canal de televisión de Newsmax, Akerson habló sobre  la  reclamación del presidente Obama, quien dijo que fue el que salvó a General Motors y creó un millón  empleos. “Todo en el mundo parece que se reduce a la política”, dijo Akerson, agregando: “Es como en la edad media, todo fue visto a través de un prisma teológico y hoy todo es visto a través de un prisma político”.

Akerson desmintió categóricamente las acusaciones de que el Gobierno Federal este involucrado en las operaciones diarias de la empresa, el gobierno federal  posee el 30 por ciento de las acciones de GM.

Akerson también aseguró que “mientras veo un panorama positivo para GM en los próximos años, no creo que la economía se ha recuperado plenamente debido al débil recuperación de los bienes y raíces”, y predijo que tomará por lo menos un par de años.

Pero donde parece que con sus declaraciones Akerson perjudica más la imagen del presidente Obama es cuando manifiesta: “Permítanme decirle esto: los primeros 13 billones de dólares que fueron  puestos en la empresa lo hizo George Bush, un republicano. El segundo [pago] llegó con el Presidente Obama. Así que tuvimos dos administraciones, dos presidentes con diferentes puntos de vista políticos, económicos y filosóficos, que decidieron que era en el mejor interés de la economía estadounidense.

Otra controversia que encara el presidente Obama es la de las críticas de miembros de los Navy Seals, por un comercial de la campaña donde para ganar puntos ante el pueblo, el Presidente usa la muerte de Usama Bin Laden. El anuncio presenta al ex presidente Bill Clinton elogiando la decisión de Obama por ordenar el asesinato de Usama Bin Laden y sugiere que su rival republicano, Mitt Romney, no pudo haber hecho la misma llamada. Ya antes había sido criticado por varios frentes, incluso por Arianna Huffington, fundadora del periódico liberal Huffington Post, quien calificó de ‘despreciable’ el comercial.

Antiguos y actuales  Navy SEALs se han sumado a los ataques al presidente Barack Obama por intentar tomarse el crédito de haber matado a Osama Bin Laden y haberlos usado a los miembros de las fuerzas especiales como ‘municiones’ para su campaña.

Brandon Webb, ex Navy Seals declaró  “que el predecesor de Obama en la Casa Blanca, George W Bush, merece gran parte de los elogios por haber sacado al hombre más buscado del mundo”.