• El rechazo al sistema de transporta de maletas y las demostraciones de empleados de esa aerolínea mantienen en jaque a la terminal aérea
MIAMI, 1 DE MARZO DE 2012, nhr.com—En cuestión de días el Aeropuerto Internacional de Miami (MIA) se ha visto siendo escenario de contratiempos que llevan el nombre de American Airlines.
Primero surgió la confrontación de American Airlines con Miami Aviation, al negarse la aerolínea a utilizar el nuevo y súper moderno centro de transporte de maletas que supone recorrer millas del aeropuerto para brindarle mejor servicio a los pasajeros.
American Airlines se niega a utilizar ese sistema, señalando que le teme, ya que mantiene una tecnología anticuada y tomó mucho tiempo ponerla en operación. “No es adecuado para las operaciones actuales de la compañía aérea en un centro de rápido crecimiento que depende de mover los equipajes rápidamente entre vuelos de conexión en horarios apretados”, manifestaron ejecutivos de esa empresa aérea.
American transporta a unos 30 millones de pasajeros al año a través del MIA, y quiere posponer el inicio del uso del sistema con el fin de que se coloque un nuevo programa a la computadora que opera el transporte de maletas. El nuevo “cerebro” cuesta entre $25 y $35 millones.
Por otra parte, ayer miércoles, empleados de esa línea aérea en Nueva York, Boston, Chicago y Miami realizaron demostraciones acusando a la empresa de querer cesantear a muchos de sus empleados. En Miami se espera que unos 700 queden fuera en las próximas semanas.
Los empleados sindicalizados en el gremio de empleados del transporte, recorrieron parte de la terminal portando pancartas y denunciando que lo que American Airlines no dice es que va a traer personal de Tulsa, Nuevo Méjico, que tiene más antigüedad, para despojar a los empleados de Miami en distintas posiciones. “Ellos ganarán el dinero aquí y lo gastarán sabrás dónde”, indican los empleados disgustados, indicando además que American Airlines está usando la bancarrota en contra de ellos.
