MIAMI 12 DE OCTUBRE DE 2020, —La negativa del candidato presidencial demócrata Joe Biden de apoyar la expansión de la Corte Suprema, tiene a muchos lideres demócratas incomodos mientras algunos medios de prensa lo están presionando para que se decida a decir, si o no.
El viernes Biden volvió a meter la pata, cuando un periodista de Las Vegas le pregunto sobre el tema y declaro que “los votantes no se merecen conocer su postura sobre empacar la Corte Suprema”, declaración que tiene temblando a los demócratas.
En una entrevista espinosa con una estación de noticias de Las Vegas el viernes, el Biden duplicó su negativa a decir si apoya la expansión de la Corte Suprema a más de nueve jueces.
“Esta es la cosa número uno que me han preguntado los espectadores en los últimos días”, comenzó Ross DiMattei de la estación KTNV.
“Bueno, los espectadores que probablemente son republicanos le han preguntado”, respondió Biden sarcásticamente.
Los votantes no “merecen” conocer la postura de Joe Biden a la expansión de la Corte Suprema
“No los votantes merecen saber dónde están parados…” DiMattei continuó.
“No, no se merecen”, interrumpió Biden. “No voy a jugar su juego.”
Biden afirmó que su posición sobre el tema no es un problema, pero Trump está haciendo que sea “para “quitar el ojo de la pelota – cambiar el tema”, otra excusa del candidato demócrata.
El jueves, el ex vicepresidente dijo que no hablaría de su postura de expansión de la Corte Suprema porque se convertiría en un titular si lo hiciera.
Eso se produjo un día después de que su compañero de fórmula, Kamala Harris, se negara a responder preguntas directas sobre la expansión de la Corte Suprema durante su debate con el vicepresidente Mike Pence.
Los principales demócratas en el Congreso, incluyendo el presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Jerrold Nadler (D-NY), han amenazado con agregar más jueces a la Corte Suprema para frustrar la mayoría de 6-3 que tendrán los conservadores si se confirma que la jueza Amy Coney Barrett, candidata nominada por el presidente Trump, llene el escaño de la difunta jueza Ruth Bader Ginsberg.