MIAMI 18 DE AGOSTO DE 2023, nhr.com—Ayer me llamó un amigo muy alarmado por una información que había recibido desde un país extranjero aliado a Estados Unidos, y donde le decían de la peligrosa alianza que han hecho 5 naciones poderosas que para principio de noviembre desarrollaran una nueva moneda para competir con el dólar americano.
Nosotros nos dedicamos a realizar nuestras averiguaciones y obtuvimos esta información:
El mes pasado, en Nueva Delhi, Alexander Babakov, vicepresidente de la Duma Estatal de Rusia, dijo que Rusia ahora encabeza el desarrollo de una nueva moneda. Será utilizado para el comercio transfronterizo por las naciones BRICS: Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.
Semanas más tarde, en Beijing, intervino el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva y se preguntaba “por qué todos los países tienen que basar su comercio en el dólar”.
Estos desarrollos complican la narrativa de que el reinado del dólar es estable porque es el dinero tuerto en una tierra de competidores individuales ciegos como el euro, el yen y el yuan.
Como dijo un economista, “Europa es un museo, Japón es un hogar de ancianos y China es una cárcel”. Él no está equivocado.
Pero una moneda emitida por los países dentro de BRICS sería diferente.
Sería como una nueva unión de descontentos emergentes que, en la escala del GDP, ahora superan colectivamente no solo a la potencia hegemónica reinante, Estados Unidos, sino a toda la categoría de peso del G-7 juntas.
Los gobiernos extranjeros que desean liberarse de la dependencia del dólar estadounidense no es nada nuevo.
Los murmullos en las capitales extranjeras sobre el deseo de destronar al dólar han estado en los titulares desde la década de 1960. Pero la charla aún tiene que convertirse en resultados.
Según una medida, el dólar ahora se usa en el 84.3 por ciento del comercio transfronterizo, en comparación con solo el 4.5 por ciento del yuan chino.
Y el uso habitual de mentiras por parte del Kremlin como instrumento del arte de gobernar ofrece motivos para el escepticismo sobre cualquier cosa que diga Rusia.
En una letanía de preguntas prácticas, como cuánto están de acuerdo las otras naciones BRICS con la propuesta de Babakov, por ahora, las respuestas siguen sin estar claras.
Sin embargo, al menos en base a la economía, las perspectivas de éxito de una moneda emitida por los BRICS son nuevas.
Por muy tempranos que sean los planes y por muchas preguntas prácticas que queden sin respuesta, esa moneda realmente podría desplazar al dólar estadounidense como moneda de reserva de los miembros de los BRICS.
A diferencia de los competidores propuestos en el pasado, como un yuan digital, esta moneda hipotética en realidad tiene el potencial de usurpar, o al menos sacudir, el lugar del dólar en el trono.
Y con la administración actual en la Casa Blanca entendemos al amigo que nos alertó sobre este complot contra el dólar y debemos estar asustado.