• Más de 400 casos de incidentes y actividades sexuales son reportados

MIAMI 24 DE SEPTIEMBRE DE 2014, nhr.com—Asistir a una biblioteca pública del condado Miami Dade se está convirtiendo en una verdadera odisea de acuerdo con una investigación que destapó el experimentado reportero del canal 10 de Miami Jeff Wein.

Los registros públicos demuestran que más de 430 incidentes de actividades de tipo criminal como robos, vandalismo, disturbios, abusos sexuales y hasta niños quedándose solos dentro de las bibliotecas.

Son unas 49 bibliotecas las que existen en Miami Dade y en todas han ocurrido incidentes en que ha tenido que intervenir la policía.

De acuerdo con el Director de Seguridad del Sistema de Bibliotecas de Miami Dade Wil Fowler, “existe mal comportamiento, y hay que sacarlos de los salones”.

El explica que en uno de los casos el pasado mes de mayo, fueron capturados dos hombres teniendo sexo oral en uno de los servicios sanitarios de la biblioteca central, cuando se le enfrento, uno de los individuos argumento que no habían carteles que prohibieran esa actividad.

Otros de los casos registrados, ocurrió en la biblioteca ubicada en el 1398 SW de la primera calle, allí se han encontrado, jeringuillas, sangre tirada en el suelo y paredes del baño así como otros artefactos para el uso de drogas.

En muchas de las bibliotecas se han capturado hombres masturbándose entre los anaqueles de los libros, los asiduos usan las computadoras para ver pornografía.

Otro de los registros públicos da cuenta de una pelea en la biblioteca del downtown, allí uno de los que intervenía en la bronca esgrimió un afilado machete.

Un caso insólito, ocurrió en la parte de afuera de una de las bibliotecas públicas, un hombre fue capturado afeitándose sus genitales con una afeitadora eléctrica, al ser requerido se negó irse, la policía tuvo que intervenir.

Fowler quien antes de ser Director de Seguridad fue agente de policía de Miami, dijo que “el personal de las bibliotecas ha sido entrenados de capacitación en conciencia de vigilancia y tratar con el público”.

Muchos de los casos quedan grabados en cámaras de vigilancia, ya que las 49 ramas están dotadas de cámaras.

Entre ese entrenamiento está en que cada uno de los empleados debe estar al tanto de la página de la policía del estado y familiarizarse con las caras de los delincuentes sexuales y depredadores que estén a un radio de 2 kilómetros de la biblioteca donde trabaje.

Algunos actos de negligencia han sido reportados, como el de dejar a niños solos dentro de algunas bibliotecas, los registros indican que 13 pequeños han sido dejados solos.

Fowlere detalla que en la biblioteca de Homestead, se reporto que un niño de solo 4 años fue hallado vagando sin ningún adulto alrededor.

En la sucursal de Culmer/Overtown, otro niño de la misma edad fue descubierto sin supervisión adulta, “aunque vigilamos, nos dirigimos cuando los vemos solos y perdidos, le preguntamos por sus familiares o tutores, tratamos de contactarlos y si no tenemos éxito, notificamos a la policía”, dijo Fowler.