• Se trata del edificio de Hialeah donde alojan una escuela y un centro de ayuda a ancianos
MIAMI, 29 DE NOVIEMBRE DE 2012, NHR.com—Una veterana institución cívico-social del exilio cubano atraviesa por problemas financieros y se está viendo castigada por el embargo hipotecario producto de la crisis inmobiliaria.
El Cuban American National Council (Consejo Nacional Cubanoamericano), está siendo demandado por el U.S. Century Bank, que posee la hipoteca del edificio donde se encuentran las oficinas del Concilio en Hialeah.
Este organismo no lucrativo que por cuarenta años ha sido emblema del exilio cubano y que además ha administrado escuelas, programas de empleo, ferias de salud, y cuyo presidente y CEO, Guarioné Díaz, protagonizó un rol importante durante la crisis de los balseros en 1994, se enfrenta ahora a la probabilidad de perder el edificio que alberga al conglomerado estudiantil y la oficina que presta ayuda a personas de escasos recursos en Hialeah, si U.S. Century Bank prosigue en su empeño.
La institución bancaria presentó una demanda por 850.000 dólares en los últimos días en contra de Codel Inc. y el Concilio Nacional Cubano Americano, con el fin de embargar el edificio de 11.098 pies cuadrados ubicado en el 1851 de Palm Ave.
De acuerdo con el CEO del banco, Carlos Dávila, él entendía que el edificio era propiedad de Codel, pero desconocía que también el Concilio Cubano Americano era parte de la hipoteca.
Por su parte, Díaz dijo que su grupo ha tratado de vender el edificio con el fin de pagar el préstamo, pero ha sido difícil teniendo en cuenta la situación económica.
Cuando los difíciles días del éxodo de los balseros en 1994, Guarioné Díaz fue un enviado presidencial para enfrentar la crisis en Guantánamo y le correspondió coordinar esfuerzos para la atención de 30.000 balseros cubanos. Las responsabilidades a las que tuvo que enfrentarse fueron sumamente difíciles.
El Concilio actualmente administra una escuela, aunque el Sistema Escolar se ha negado a enviar alumnos a la misma, lo que ha hecho que los fondos sean escasos y no se pueda alcanzar la cantidad de dinero para pagar la hipoteca.
“Hemos tratado por todos los medios posible de cumplir”, dijo Garioné Díaz, esperando que el U.S. Century evite de alguna forma el embargo hipotecario.