Llaman la atención de la opinión pública internacional para frenar la escalada de violencia institucional que se está recrudeciendo en Cuba
MIAMI 9 DE NOVIEMBRE DE 2021, nhr.com—La Comisión de Apoyo y Protección a los Manifestantes del Proyecto Archipiélago registró en una semana, del 31 de octubre al 6 de noviembre, un total de 45 denuncias de acciones represivas procedentes de La Habana, Matanzas, Cienfuegos, Holguín, Guantánamo, Pinar del Río, Las Tunas y Ciego de Ávila, en la mayoría de los casos conteniendo violaciones a varios derechos humanos reconocidos internacionalmente.
En un informe publicado en Telegram, Archipiélago denuncia mítines de repudio en domicilios de activistas en diversas provincias, entre ellos los realizados contra el escritor Rafael Vilches en Cienfuegos, el dramaturgo Yunior García Aguilera en La Habana y la ilustradora Mary Esther Lemus Cordero, también en la capital.
La plataforma también pone de ejemplo el “incremento sustancial de citaciones e interrogatorios, que son ilegales porque no responden a un proceso penal previo”.
Según los testimonios recopilados, “los órganos de represión del Estado cubano han acentuado el carácter coercitivo y humillante de estos interrogatorios. Mientras más se acerca la fecha de la manifestación, la manipulación psicológica se vuelve sistemática, más agresiva y rigurosamente planeada por el Estado”.
También denuncia el “aumento de operativos policiales de vigilancia sostenida a los coordinadores de Archipiélago y otros activistas organizados o no, así como contra sus familiares y amistades”, además de “detenciones arbitrarias en varias ciudades del país”, entre ellas las del profesor Albert Sánchez y la reportera Iliana Hernández, en La Habana, así como la de Leinier Cruz, en Guantánamo, “que derivaron tratos degradantes y humillantes”.
“Continúan los despidos laborales discriminatorios por ideas y posturas políticas, como el de Edel Carrero, quien ha sido expulsado de su trabajo en el Centro de Teatro de La Habana, un organismo del Consejo Nacional de las Artes Escénicas (CNAE) dependiente del Ministerio de Cultura”, añade el informe.
El documento recoge “amenazas y actos de violencia psicológica que se practican a veces combinadas con violencia física y con el empleo de ciudadanos aparentemente comunes”.
El informe condena que el régimen cubano “despliega toda una ofensiva de manipulación de la ciudadanía e incitación a la violencia de forma masiva por diversas vías“, entre ellos la campaña de descrédito desde los medios oficiales controlados por el PCC, el “diseño de estrategias gubernamentales de control social y comunitario” como la programación de activistas oficiales en coincidencia con las fechas de la marcha cívica y “un Poder Judicial al servicio de los intereses ideológicos del Estado“.
Para Archipiélago, “se trata de inducir un estado de impotencia absoluta en los ciudadanos utilizando métodos de control emocional y conductualcuyo fin es que las personas desistan de ejercer sus derechos”.
“Se confirma que las formas represivas van en ascenso permanentemente y ya se han transnacionalizado porque alcanzan a las familias migrantes en el país y sus miembros en la diáspora.
Archipiélago reitera “la invitación a representantes de la prensa y los organismos internacionales para que visiten el país para esa fecha“, pues “será un modo de acompañar en el lugar de los acontecimientos y eventualmente disuadir al Gobierno del uso de la fuerza”.