MIAMI 16 DE JUNIO DE 2015, nhr.com—Mucho se está hablando en los diferentes programas de radio sobre el sistema público de ómnibus, y el que deja mucho que desear, pero en ninguno de esos programas hemos escuchado un comentario razonable de cómo resolver el desastre que es Miami Dade Transit System.
De acuerdo con un grupo de choferes que critican a la administración del sistema de ómnibus públicos, el único problema existente en el MDT, son los sindicatos que tienen atados a los choferes y a la administración.
En nelsonhortareporta.com realizamos una investigación sobre la historia de los ómnibus metropolitanos en el condado Dade que es como le llamaba antes.
Hasta 1960 habían 4 diferentes compañías de ómnibus privadas que daban servicio de ómnibus a todo el condado Dade, entre las cuatro competían y se repartían las diferentes zonas, el movimiento masivo de transito funcionaba a las mil maravillas.
En 1960, la Comisión del Condado Dade de entonces aprobó una ordenanza que creaba la Autoridad Metropolitana de Transito (MTA) de esa manera irían a unificar las diferentes operaciones de transito en un solo servicio en todo el condado.
La ordenanza proporcionaba la compra, desarrollo y operación de un sistema de transporte masivo adecuado administrado por una agencia que se denominó, National City Managment Company.
De esa forma, The Miami Transit Company, Miami Beach Railway Company, South Miami Coach Line y Keys Transit Company de Key Biscayne, pasarían a ser administradas por el condado Dade.
Con el paso de los años y como todo lo que toca el gobierno se convierte en un desastre, el sistema de transito masivo pasó por distintas administraciones, MTA, evolucionó hacia la administración de transporte de Metro-Dade, luego a la Agencia de Transito de Metro Dade, después a la Agencia de transito de Miami Dade y finalmente como se conoce ahora, simplemente, Miami-Dade Transit.
Según fuentes, el sistema de transito masivo, nunca ha funcionado, después que el condado asumió su operación.
Recordamos que a finales de los años 60’s y principio de los 70’s, hubo un empresario cubano que quiso que la administración de entonces le otorgara permisos para operar un sistema de Mini-Buses que iría a enlazar las avenidas con las calles, de manera que los ómnibus metropolitanos recorrieran por las calles y los minibuses por las avenidas.
Henry Pino invirtió miles de dólares en adquirir varias “guagüitas” las cuales estaban pintadas de azul, rojo y blanco e identificadas con el nombre de Mini-Bus, realizo todas las gestiones pertinentes, presentaciones ante los comisionados, demostración gratuitas para pasajeros con el fin de demostrar que el sistema de Pino funcionaba, cuando parecía que todo estaba encaminado al éxito, una jugada del sindicato de choferes entorpeció las gestiones y Henry Pino desistió de su empresa.
Pino se encuentra actualmente en Panamá donde es propietario de una empresa que da servicios al Canal.
Desconocemos si es posible eliminar el sindicato, pero de acuerdo con los consultados por nelsonhortareporta.com, esa sería la única manera de superar los problemas del sistema de transporte público.
