MIAMI 19 DE NOVIEMBRE DE 2024, NHR.COM—Varios funcionarios actuales y anteriores del Departamento de Justicia y del FBI han comenzado a comunicarse con abogados en previsión de ser investigados penalmente por la administración Trump, según tres personas con conocimiento de sus deliberaciones.
Después de la decisiva victoria electoral de Trump, muchos funcionarios del Departamento de Justicia y miembros de carrera están nerviosos por la posibilidad de que sean objeto de la mira de los leales a Trump, en particular los miembros del Congreso.
Pero la selección del exrepresentante Matt Gaetz, un aliado incendiario de Trump que fue objeto de una reciente investigación del FBI, para dirigir el departamento ha aumentado drásticamente la sensación de alarma, dijeron las fuentes.
“Todo lo que hicimos fue transparente”, dijo un ex funcionario de alto rango del FBI que ha comenzado a comunicarse con abogados porque espera ser procesado. “Pero este es un mundo diferente”.
El funcionario, que habló bajo condición de anonimato por temor a convertirse en un objetivo aún mayor, no cree que ningún intento de procesarlo tenga éxito.
Los jueces y los jurados tienen el poder de desestimar los casos o declarar inocentes a los acusados si consideran que los procesamientos carecen de fundamento.
Pero, como muchos otros funcionarios actuales y anteriores del Departamento de Justicia, se está preparando para una batalla legal potencialmente larga y costosa, así como para la posibilidad de investigaciones prolongadas del Congreso, después de que Trump asuma el cargo en enero.
Los empleados de carrera del FBI son especialmente vulnerables, agregó el funcionario. Dado que ganan menos dinero que en el sector privado, dependen de las pensiones que reciben después de 20 años.
“Los agentes tienen que cumplir 20 años”, dijo el ex funcionario de alto rango del FBI. “Estas personas no tienen opciones”.
Un ex funcionario de alto rango del Departamento de Justicia que sirvió durante el primer mandato de Trump dijo que él también veía la nominación de Gaetz como una señal de la seriedad de la promesa del presidente electo de vengarse de quienes lo investigaron.
“Necesita poder controlar el departamento, lo que puede hacer a través de un fiscal general leal que le deba cuentas”, dijo el ex funcionario del Departamento de Justicia.
Gaetz, que fue objeto de una investigación federal por tráfico sexual que terminó sin cargos, “entiende que le debe todo a Trump, quien también puede proteger a Gaetz a través de su poder de indulto”, agregó el exfuncionario.
“Trump confía en que Gaetz hará lo que Trump le diga que haga”. Trump y sus partidarios han argumentado constantemente que todas las investigaciones penales en su contra han tenido motivaciones políticas y que los funcionarios del Departamento de Justicia y del FBI merecen ser procesados.
Semanas antes del día de las elecciones, Steven Cheung, un portavoz de Trump, pidió que se desestimaran los cargos del 6 de enero y todos los cargos penales federales y estatales contra Trump. “Todo este caso es una farsa y una cacería de brujas partidista e inconstitucional que debería desestimarse por completo, al igual que TODOS los engaños demócratas restantes”, dijo Cheung.
Conmoción dentro del Departamento de Justicia.
Los funcionarios del Departamento de Justicia, incluido el fiscal general Merrick Garland, se sorprendieron por la decisiva victoria electoral de Trump. Durante los últimos cuatro años, Garland ha sostenido que seguir estrictamente las normas posteriores al caso Watergate que requieren que el Departamento de Justicia trabaje de manera no partidista en las investigaciones penales restablecería la confianza pública en el Departamento de Justicia.
En cambio, algunos funcionarios de carrera del Departamento de Justicia lloraron después de la elección, consternados por el hecho de que un gran número de estadounidenses aparentemente siguen creyendo las afirmaciones de Trump de que el departamento es un pozo negro de corrupción.
