MIAMI 23 DE SEPTIEMBRE DE 2021, NHR.COM—Mientras la Casa Blanca dice que los haitianos en la frontera están siendo deportados, su propio Departamento de Seguridad Nacional se encarga de desmentirlo.
Anoche el Departamento de Seguridad Nacional reveló que más de 4,600 migrantes que se reunieron bajo un puente en Del Río, Texas, en los últimos días han sido retirados del campamento improvisado, pero sin especificar cuántos han sido liberados en Estados Unidos.
El departamento dijo que menos de 5,000 migrantes permanecían en el sitio de Del Río, que según algunos estimados tenía a casi 15,000 ilegales antes de que la administración Biden ordenara que las expulsiones comenzaran el domingo pasado, algo que ha sido calificada como falsas, solo un grupo de 1,400 han sido enviadas a Haití, el resto están siendo enviadas a varias partes de Estados Unidos donde los ilegales tienen amigos o familiares.
Esto fue confirmado anoche, según el DHS, 1,401 migrantes han sido deportados a Haití, mientras que otros 3,206 han sido procesados para su expulsión bajo la autoridad relacionada con la pandemia conocida como Título 42 o “colocados en procedimientos de deportación”, lo que en este caso significa ser liberados con un aviso para presentarse en una oficina de inmigración dentro de los 60 días, lo único que la mayoría permanecen escondidos y no se presentan, ya que existen abogados y familiares que los entrenan a lo que tienen que hacer.
Sin embargo, el DHS no especificó cuántos de los 3,206 han sido expulsados bajo el Título 42 y cuántos han sido liberados en los Estados Unidos.
No está claro cómo los funcionarios determinan qué migrantes son deportados y cuáles son liberados en los Estados Unidos. Sin embargo, Wade McMullen, un abogado de Robert F. Kennedy Human Rights, dijo a la agencia de prensa que la mayoría de los migrantes que él y otros defensores han entrevistado y que han sido soltados han sido familias con niños pequeños y mujeres embarazadas.
Los migrantes están siendo transferidos en autobús desde Del Río, una ciudad de 35,000 personas, a El Paso, Laredo o el Valle del Río Grande a lo largo de la frontera de Texas para su procesamiento, dijo otro funcionario estadounidense a la AP. Algunos también están siendo llevados a Tucson, Arizona, en vuelos que se agregaron esta semana.
Las cifras publicadas por el DHS el jueves sugieren que varios miles de migrantes también han optado por cruzar de regreso sobre el Río Bravo hacia México, probablemente apostando a que sus solicitudes de asilo serán vistas más favorablemente allí que en los Estados Unidos.
Como estamos informando en otro artículo, unos 12,000 haitianos, cubanos, venezolanos y de otros países de Centro América, salieron en las ultimas horas desde Chiapa rumbo a la frontera con estados Unidos.
Mientras tanto, los legisladores republicanos dicen que el caos es otro ejemplo de las políticas fronterizas de la administración Biden que fomentan un aumento de la inmigración ilegal que ha abrumado a las autoridades. Los demócratas han pedido que cesen los vuelos de deportación y criticaron a los agentes de la Patrulla Fronteriza que fueron vistos usando sus caballos para tratar de impedir que los migrantes crucen el Río Bravo durante el fin de semana.
El lunes, el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, advirtió a quienes intentan ingresar ilegalmente a estados Unidos que “serán devueltos”, algo que se esta comprobando que no es cierto.
“Su viaje no tendrá éxito, y estará poniendo en peligro su vida y la vida de su familia”, dijo en una conferencia de prensa, Mayorka, como estamos informando, el propio Departamento de Seguridad Nacional ha negado estas declaraciones.
