JEFE DE POLICÍA DE MIAMI BEACH, pide ayuda a la policía de Miami Dade para parar la violencia traída por revoltosos de otros estados

MIAMI 17 DE MARZO DE 2021, NHR.COM—Después del caos que viene ocurriendo en South Beach desde el fin de semana pasado, cuando una multitud de jóvenes, mayormente de la raza negra que visitan la playa por el “Spring Break”, rodearon a unos policías que detenían también a otro joven, el jefe Richard Clements ha ordenado añadir mas fuerza para parar la violencia.

Ahora más agentes de policía patrullan las calles de South Beach debido a unas caóticas vacaciones de primavera que se han llenado de violencia y anarquía.

Anoche, el Departamento de Policía de Miami Beach llamó a la policía de Miami-Dade para que le respaldara a su cuerpo. El objetivo es inundar las calles con oficiales armados después de un lunes por la noche mortal y violento.

Una llamada al 911 por disparos en la calle 6 y Collins avenue, donde los detectives encontraron casquillos y sangre, pero ninguna víctima.

30 minutos más tarde otra llamada de ayuda a unas pocas millas al norte en un área generalmente tranquila de Miami Beach, un vecino vio a un hombre que había sido baleado varias veces, muriendo en la escena.

El jefe de policía de Miami Beach, Richard Clements, declaró que sus oficiales están haciendo todo lo posible para mantenerse al día.

Desde febrero, 3 los agentes de Miami Beach han arrestado a casi 900 personas, confiscado al menos 78 armas de fuego y multado a mas de 5.000 choferes por infracciones de tráfico.

“Nuestra inteligencia nos dice que seguiremos viendo grandes multitudes durante toda la semana y hasta el fin de semana”, dijo Clements.

Gene Robert Duplessy, de 61 años, terminó hospitalizado después de que su brazo fuera pisoteado y aplastado por las personas que bailaban encima de su coche.

Duplessy le dijo al canal 10 de Miami que, “esa es demasiada gente, y sin respeto”, dijo. “Eso no es agradable.”

El jefe Clements identificó al hombre asesinado a tiros el lunes por la noche como Sowe Amadu, de 27 años, residente del sur de Florida.

El martes por la noche, las cosas estaban afortunadamente mucho más tranquilas.