MIAMI 19 DE NOVIEMBRE DE 2015, nhr.com—En una semana cargada de activismo comunitario con el fin de resguardar una histórica iglesia construida en 1940 como edificio histórico, la comisión de esta municipalidad y la Junta de Preservación Histórica de Miami Dade, viró las espaldas a los residentes y prefirió seguir con el proceso de demolición de la iglesia para dar paso a la expansión del Bal Harbour Shop.
El martes en la noche y en el ayuntamiento de Bal Harbour se reunieron los miembros de la comisión para discutir el controversial asunto del nombramiento como edificio histórico la vieja Church by the Sea.
Y aunque la Alianza de residentes de Bal Harbour convocó a sus miembros para que asistieran a la reunión de la ciudad, estos se vieron imposibilitados de entrar ya que la misma ocurrió a puertas cerradas, algo insólito en la historia de esa municipalidad.
Mientras tanto ayer a las 2 de la tarde se reunió en la Junta de Preservación Histórica de Miami Dade para tratar la designación de la Church by the Sea, edificio histórico, de nuevo la Alianza de Residentes de Bal Harbour convocó a todos sus residentes para alzar sus voces en contra de entregar la histórica iglesia a la familia Whitman para que la desaparezcan y en su lugar hagan un parqueo o mas tiendas.
Pero la mayoría de los miembros de esta Junta prefirió abandonar a los residentes de Bal Harbour y aliarse a los urbanizadores y no apoyar la designación de Church by the Sea como un edificio histórico, para dar paso a la demolición de la iglesia para abrir la vía de expansión del Centro Comercial.
ACUERDO
La congregación que desde hace tiempo tenía un acuerdo con los dueños de Bal Harbour Shops y vendieron la propiedad donde está la iglesia, habían iniciado la demolición del edificio, sin ni siquiera tener los permisos necesarios, la obra fue parada hasta que no sacaran los permisos, algo que hicieron días después.
La Alianza de residentes, impuso la pasada semana una demanda contra la familia Whitman, propietaria del Centro Comercial, pero estos optaron por culpar a sus competidores del Aventura Mall y el Distrito de la Moda de Miami de ser los que estaban detrás de la Alianza para entorpecer la expansión del Bal Harbour Shop.
Ayer en su reunión, la Junta de Conservación Histórica del Condado Miami-Dade decidió ignorar las reglas de notificación pública y los desarrolladores y sus lobistas usando tácticas engañosas lograron conseguir descartar el deseo de los residentes que verán en pocos días desaparecida su histórica iglesia.
La Junta voto 6-3 para no proceder, tomando un giro inesperado y legal que apareció a mistificar y ofendió algunos miembros de la Junta, incluyendo a su Presidente Mitch Novick,
Por su parte Kathleen Kauffman Jefe de conservación Condado citó criterios de estricta conservación especiales que se aplican a iglesias y concluyeron que Church by the Sea no los cumplió y el abogado del Condado Ed Kirtley dijo a la Junta que no podían tomar ninguna otra medida sin su recomendación positiva.
Los criterios citados por Kauffman, significan que “las iglesias pueden designarse histórico sólo si tienen mérito arquitectónico inusual”, dijo. Y aunque Church by the Sea, fue el trabajo de dos prominentes arquitectos de Miami, es una mezcla que no se destaca suficientemente, concluyó Kauffman.
Un grupo de miembros de la iglesia que había testificado contra la designación del edificio, y que estuvo de acuerdo con la congregación y aprobó la venta, aplaudió el voto, el cual decepcionó a un igualmente numeroso grupo de conservadores del medio ambiente, activistas, residentes y miembros disidentes de la iglesia.
