MIAMI 23 DE ABRIL DE 2024, nhr.com—La propietaria de una firma de contabilidad en Hialeah ha sido acusada de supuestamente presentar declaraciones de impuestos fraudulentas en nombre de sus clientes.
Un gran jurado del Tribunal del Distrito Sur de Florida acusó formalmente a Beatriz Toledo propietaria de Immigration and Tax Service Group LLC de 15 cargos de ayuda y asistencia en la preparación de declaraciones de impuestos falsas y un cargo de desacato al tribunal.
La acusación dada desde el pasado 11 de abril alega que la mujer de 60 años preparó intencionalmente declaraciones de impuestos falsas y fraudulentas para sus clientes de 2016 a 2020. Estas declaraciones supuestamente incluían reclamaciones falsas para el Crédito de Energía Residencial, que permitía a los contribuyentes reclamar un crédito por energía calificada. gastos de ahorro y deducciones detalladas falsas para impuestos sobre las ventas estatales y locales, gastos comerciales y otras deducciones detalladas, según el tribunal.
La acusación también alega que la preparación de declaraciones de impuestos falsas por parte de Toledo violó una orden judicial permanente, dictada en su contra por un juez de un tribunal de distrito en 2010, que le prohibía proporcionar o ayudar a proporcionar servicios fiscales fraudulentos para otros.
En 2009 se presentó una demanda en un tribunal federal contra Toledo, buscando impedirle preparar declaraciones de impuestos falsas; Toledo firmó una moción conjunta para la entrada de una orden judicial permanente que se presentó en 2020.
A pesar de estas prohibiciones, el tribunal alegó que Toledo continuó preparando declaraciones de impuestos falsas para los años fiscales 2016 a 2021, según las alegaciones de la acusación.
Toledo enfrenta hasta tres años de prisión por cargo y una multa de hasta $250,000 por cargos de impuestos, y hasta una mena máxima de cadena perpetua y una multa de hasta $250,000 por el cargo de desacato al tribunal.
Ella compareció ante un juez, para ser instruida de cargos y se le asignó un abogado temporal y la dejaron en libertad después de firmar una fianza de $100,000 dólares pagada por su hijo Albert Toledo, así como una fianza personal de 250.000 dólares.
La oficina local de Miami de Investigación Criminal del Servicio de Impuestos Internos fue la que investigó el caso.