MIAMI 17 DE SEPTIEMBRE DEL 2018, nhr.com—La periodista liberal del Miami Herald Fabiola Santiago, publicó un comentrio la pasada semana, indignada porque se le decían “socialista” al nominado liberal a la gobernación del estado Andrew Gillum, sin embargo eso no nada inventado, el mismo lo ha dicho, y ha aceptado los apoyos de dos connotados socialistas confesos, Bernie Sanders y Alexandra Cortez, pero además Gillum está involucrado en una investigación que sostiene el Buro Federal de Investigaciones contra uno de sus mejores amigos, al que ha beneficiado en el pasado, ha viajado a Costa Rica y Nueva York en eventos sospechosos.
Para los que no conozcan como se inició esta investigación de la que hablamos aquí tienen algunos de los pormenores:
Según el periódico Tallahassee Democrat, tres agentes encubiertos del FBI aparecieron en Tallahassee en el anio 2015, haciéndose pasar por desarrolladores de fuera de la ciudad interesados en buscar oportunidades en la capital del estado. Los agentes pasaron el año siguiente codeándose con líderes de negocios locales y socializaron con los funcionarios locales antes de desaparecer a principios de 2017.
Ese verano, el FBI entregó citaciones al Gobierno de la ciudad solicitando miles de páginas de documentos que se remontan a 2012.
Semanas después se emitieron más citaciones, al igual que una orden de registro dirigida a un Comisionado de la ciudad y a su asociado de negocios de larga duración.
Aunque es imposible decir cuán lejos está la investigación hoy, a juzgar por el número de empresarios locales que se vieron el mes pasado entrando y saliendo de una corte federal local con sus abogados, los encausamientos de un Gran Jurado podrían estar aproximándose.
Entonces, ¿dónde encaja Andrew Gillum en todo esto?
Gillum fue elegido alcalde en 2014 y ha ocupado la oficina de la ciudad desde 2003, cuando a los 23 años se convirtió en la persona más joven en ganar un escaño en la Comisión de la ciudad de Tallahassee.
Después de pasar una década y media en el gobierno local significa haberse encontrado en el camino con una amplia gama de cabilderos y abogados, todos con sus propios intereses y cualquiera de los cuales podría, teóricamente, ser atrapado en la investigación.
Sin embargo la conexión más directa de Gillum en este caso es a través de un empresario local y cabildero identificado como, Adam Corey, que es quien parece haber presentado a los agentes encubiertos del FBI a una serie de actores clave en la ciudad, incluyendo a Gillum.
Gillum y Corey se conocen desde sus días universitarios, Corey sirvió como Tesorero de Gillum durante su campaña a la alcaldía de Tallahassee en 2014.
En 2016, Corey supuestamente estableció una reunión en su restaurante de Tallahassee entre Gillum y los agentes del FBI (a quienes creía que eran desarrolladores). De acuerdo con un correo electrónico obtenido por el periódico Tallahassee Democrat, Corey hizo la invitación para esa reunión mientras ambos, Gillum y el estaban en un exclusivo complejo de lujo en Costa Rica a un costo de $1.400 la noche. Gillum alega que fue un viaje personal en el que no se discutió ningún asunto, pero aparentemente los agentes no parecen estar convencidos de esto.
Poco después, Corey también organizó un encuentro de fin de semana ese mismo año a la ciudad de Nueva York, donde él, Gillum, y por lo menos dos de los agentes encubiertos del FBI tomaron un paseo en barco alrededor de la Estatua de la Libertad.
Gillum, fue fotografiado en el barco con uno de los agentes, que se decía nombrar Mike Miller. Ese viaje sigue siendo el tema de una investigación ética del estado.
Gillum se ha negado a declarar públicamente si asistió a un Juego de béisbol o a la obra Hamilton de Broadway, que también ha sido mencionados en la invitación digital que Corey envió al grupo, pero el alcalde sostiene que él pagó su propio viaje durante las festividades y que el mismo era “simplemente una reunión de amigos” fuera del horario de trabajo, “he conocido a Adam durante 20 años y he pasado tiempo con Mike, que durante casi un año lo conocí, alguien que se retrataba a sí mismo como un desarrollador interesado en invertir en el lado sur de Tallahassee”, dijo Gillum en un comunicado el año pasado cuando comenzaron a investigar los agentes del FBI, “no se usó dinero público y no se discutió ningún negocio de la ciudad en el viaje”, declaró.
Si los agentes del FBI organizaron los viajes, implica que su interés en Gillum se había convertido en una investigación “manifestada”, dijeron algunas fuentes, además requeriría que los agentes que trabajan el caso demuestren a sus jefes que tienen alegaciones o hechos sobre fechorías criminales que justificaría tener a bordo del bote en Nueva York al candidato a gobernador Andrew Gillum.
Ese viaje en barco también habría implicado a funcionarios del Departamento de justicia en Washington, los agentes dicen, “quienquiera que fuera invitado en ese barco, y lista es corta, se ha revisado varias veces”, dijo el ex agente del FBI James Wedick, quien trabajó en muchas investigaciones de corrupción pública durante 34 años en la oficina, “no podemos dejar fuera de ese viaje a cualquiera que sea digno de una investigación criminal”.