MIAMI 17 DE JULIO DE 2024, NHR.COM—El departamento liderado por Alejandro Mayorka, está diciéndole a los agentes del Servicio Secreto que, si quieren mantener sus empleos, “mantengan la boca cerrada” sobre lo ocurrido en el mitin de Trump.
Los miembros republicanos de la Cámara de Representantes en el Comité de Supervisión dijeron el martes que el Departamento de Seguridad Nacional se ha hecho cargo de las comunicaciones entre el comité y el Servicio Secreto de Estados Unidos y se han negado a confirmar la hora de una sesión informativa que se suponía tendría lugar hoy.
La interposición del Departamento de Seguridad Nacional se produce mientras el Congreso busca respuestas del Servicio Secreto sobre la falla de seguridad en el mitin de Donald Trump del 13 de julio en Pensilvania, donde se atentó contra la vida del presidente Donald Trump.
El USSS había acordado previamente informar al comité ayer martes.
“Después de que el Servicio Secreto acordó informar a los miembros del Comité de Supervisión de la Cámara el martes, el Departamento de Seguridad Nacional se hizo cargo de las comunicaciones con el Comité y desde entonces se ha negado a confirmar una hora para la reunión informativa.
El Comité de Supervisión tiene un largo historial de supervisión bipartidista del Servicio Secreto y la falta de profesionalismo que estamos presenciando por parte del liderazgo actual del DHS es inaceptable”, dijo una portavoz del Comité de Supervisión en un comunicado.
“Si bien el Servicio Secreto confirmó que se espera que la directora Cheatle se presente a la audiencia del Comité el 22 de julio, para evitar cualquier intento por parte del DHS de dar marcha atrás en su comparecencia, el Presidente emitirá una citación para que asista.
La directora Cheatle debe responder ante el Congreso. y al pueblo estadounidense sobre el fracaso histórico que ocurrió durante su mandato”, añadió.
Según fuentes informaron a Dan Bongino, ex agente del Servicio Secreto, que el Departamento de Seguridad Nacional se metió en el asunto con la finalidad de controlar la boca de los agentes.
“Fuentes del Servicio Secreto me dijeron que, si quería conservar sus trabajos tendrían que mantener sus bocas cerradas”, dijo Bongino.
El comité también solicitó al Servicio Secreto de Estados Unidos que entregue información y registros relacionados con la manifestación del 13 de julio, incluidos documentos, comunicaciones y grabaciones del evento y la planificación.