MIAMI 30 DE JULIO DE 2021, nhr.com—El dictador de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, ha hecho una nueva presencia pública para echar a correr bolas rojas a su homólogo colombiano Iván Duque a quien acusa de estar en contubernio con una de las personalidades cuyo nombre está vinculado al asesinato del presidente haitiano Jovenel Moïse la noche del 6 al 7 de julio.
Nicolás Maduro, vestido con un chándal con los colores oficiales de su país, apareció en un video de unos minutos en el que anunció que había hablado con el nuevo primer ministro de Haití, Ariel Henry, para advertirle de las autoridades bogotanas y su deseo de socavar la investigación sobre el asesinato del presidente Moïse.
“Hablé con el primer ministro Ariel Henry hace 4 o 5 días para decirle que tenga cuidado porque si el gobierno de Iván Duque está en contacto con la policía, es para asegurarse de cómo obstaculizar la investigación”, dijo el dictador Maduro, refiriéndose a los falsos informes de manipulación de la investigación que se está llevando a cabo actualmente en Haití.
“Quieren entorpecer la investigación y ocultar los vínculos de la mafia colombiana con las autoridades en el asesinato de Jovenel Moïse”, denunció el presidente Maduro, quien no puede creer que la empresa que contrató a los mercenarios colombianos en Miami no esté siendo investigada, y denuncio que está en relación con la extrema derecha venezolana del otro presidente de Venezuela Juan Guaidó,
A Nicolás Maduro le resulta aún más extraño que uno de los líderes ejecutivos de esta empresa contratista mercenaria sea amigo y amigo íntimo de Iván Duque, el presidente colombiano.
“Hay múltiples videos y fotos que atestiguan la presencia de esta Santa María, cómplice del asesinato de Jovenel Moïse, en el palacio presidencial colombiano en Bogotá”, continuó Maduro.
“Por eso le dije al primer ministro haitiano, ¡cuidado! Por eso le digo al pueblo haitiano, ¡cuidado! ” advirtió el dictador venezolano, al creer que el personal policial enviado por Bogotá tiene la misión de desviar la investigación sobre el asesinato del presidente Jovenel Moïse.