Otro aumento de la FPL

• Será para sufragar un proyecto aunque éste no se lleve a la realidad

 

MIAMI 26 DE OCTUBRE DE 2011, nhr.com—El tema que en el día de ayer invadió los programas de micrófonos abiertos del la radio hispana en el sur de la Florida fue el aumento que recientemente le aprobó la Comisión de Servicio Público de la Florida a la Florida Power and Light (FPL).

El aumento que en esta ocasión logró la FPL que se aprobara se considera un adelanto en la facturas eléctricas a los consumidores, destinado a la inversión en la construcción de un nuevo generador de energía nuclear en Turkey Point. El nuevo aumento ascenderá a $2.20 mensules para un hogar utilizando el promedio de 1,000 kilovatios hora de electricidad al mes; el incremento fue aprobado por unanimidad.

Lo que no se comprende de esta aprobación es que si la FPL decide no construir lo programado, no está en el deber de devolverle el pago a los consumidores.

Entre los comentaristas que dedicaron su programa de ayer a esta novedad nada agradable para los consumidores, algunos se mostraban indignados con el aumento,

También los oyentes se dieron gusto protestando por las tarifas eléctricas. Pero de acuerdo con una conversación sostenida con Manny Rodríguez, director regional de Asuntos Externos de la FPL en Miami-Dade, “las tarifas de esta compañía es la menor que existe en toda la Florida y en muchos estados del país”.

En nelsonhortareporta.com sacamos números sobre lo que los consumidores deben abonar a la compañía de electricidad. En una casa que paga 350 dólares mensuales de electricidad,el costo es de aproximadamente 11 dólares diarios. En uno de los programas radiales escuchamos a una señora que dijo llamarse Camila, que manifestó que pagaba 35 dólares al mes y ahora está pagando 95, lo que significa que su costo de electricidad es de $3.16 diarios.

Duele aceptar todo incremento, muy particularmente cuando se supone sea para lograr un objetivo, y conozcamos, de antemano, que de no llevarse a cabo esa meta el consumidor se ve obligado a pagar igualmente.

Lo único que puede dar algo de tranquilidad es cuando pensamos en lo dura y calurosa que sería la vida en Miami sin la FPL.