• Al vigilante voluntario le ha salido una pariente que hasta lo califica de racista

MIAMI, 18 DE JULIO DE 2012, NHR.com–El vigilante voluntario George Zimmerman, acusado de asesinato en segundo grado por la muerte de Trayvon Martin el pasado mes de febrero, ahora también es parte del mundo envuelto en acusaciones de abuso sexual.

La agencia AP dio a conocer que una joven emparentada ha declarado que fue “acosada sexualmente” por Zimmerman cuando eran niños.

La joven, identificada como Testigo Número 9, afirma haber sido manoseada, sobada y besada por Zimmerman, cuando ella tenía 6 y él 8 años de edad. El “acoso” ocurría, según ella, cuando coincidían en reuniones familiares y continuó hasta que ella tuvo 16 años,

El abogado de Zimmerman, Mark O´Mara, calificó el dato “declaración irrelevante sin confirmar”. Que defenderá enérgicamente al joven acusado de las alegaciones del pariente. Pero los fiscales anticipan que usarán esa declaración, así como otra que califica a Zimmerman de racista pero sin hacerla pública ahora para no influenciar en los miembros del jurado por seleccionar.

Al respecto, un experto opina que una acusación formal es prácticamente imposible porque la ley limita el tiempo que la presunta víctima puede presentar el caso.

De hecho, la declaración fue tomada por la policía el 20 de marzo, unos días después de la muerte del Trayvon, al mismo tiempo que miles alegaban que el joven fue asesinado por ser negro y protestaban porque Zimmerman no era apresado e investigado a fondo.

La pariente añadió que “trataba de pararlo pero él era más grande y fuerte”. Años después, alrededor de 2005, según declaró, sus padres coordinaron una cita con Zimmerman en un restaurante tras conocer el presunto acoso. El joven, entonces de 21 años, pidió perdón y se fue.

En otra declaración, la pariente acusa a Zimmerman de racista, aún cuando no pudo citar comentario específico alguno de Zimmerman sobre el tema.

Los periódicos The Orlando Sentinel y Sun Sentinel, así como el canal de televisión WFTV, recurrieron al juzgado para obtener el derecho a publicar la declaración.

El juez Kenneth Lester aceptó la solicitud, expresando que “agregar esa declaración ayudará a quienes quieren creer que hubo una motivación racista para matar, pero será descartado por quienes no crean que hubo motivación racista”.

Al mismo tiempo, la fiscalía reveló el contenido de unas 145 llamadas telefónicas que Zimmerman realizó desde la cárcel. En una llamada a su esposa, el reo recordaba que quiso ser sacerdote una vez y capellán otra vez.

El abogado de la familia del fallecido, Benjamín Cramp, opina que la declaración pudiera ser usada para mostrar que Zimmerman “tiene un historial de violencia y manipulación”.