MIAMI 13 DE NOVIEMBRE DE 2020,—El presidente de la Comisión Federal electoral Trey Trainor cree que el fraude electoral está teniendo lugar en los estados que aún cuentan las boletas, según comentó en las últimas horas.
Durante una aparición en el programa “Informe Nacional” de Newsmax TV, Trainor dijo que los lugares que no otorgan a los observadores acceso para ver el proceso de escrutinio de boletas podrían estar involucrados en el fraude electoral.
“Creo que hay fraude electoral en estos lugares”, dijo. “De lo contrario, permitirían que los observadores entrarían.”
A pesar de ganar una orden judicial, que permite a la campaña de Trump enviar observadores para ver el escrutinio de las boletas en Pensilvania desde seis pies de distancia, Trainor dijo que los observadores de boletas “no se les ha permitido entrar en los lugares de votación de una manera significativa”.
Dijo que cuando se le permitió a los observadores observar, se movieeron las máquinas para detrás de una pared alejado más de los seis pies requeridos por la orden judicial.
“No se les ha permitido ese acceso significativo”, dijo, agregando, “no ha habido transparencia en las elecciones”.
“Todo nuestro sistema político se basa en la transparencia para evitar la aparición de la corrupción”, dijo señalando que Pensilvania y otros estados no están llevando a cabo el escrutinio de manera transparente.
“La ley estatal permite que esos observadores estén ahí”, dijo, agregando que, si la ley no se está siguiendo, entonces esta elección es “ilegítima”.
Dijo que las demandas presentadas por la campaña de Trump son “acusaciones muy válidas” que deben ser “completamente examinadas” por el sistema judicial. Predice que algunos de los desafíos legales probablemente terminarán en la Corte Suprema.
Ayer el equipo legal de Trump tuvo una victoria en los tribunales de Pennsylvania, cuando un juez de ese estado falló a favor de la campaña del presidente Donald Trump y ordenó que el estado no tenga en cuenta las boletas electorales enviadas por correo, que hubieran requerido prueba de identificación y que ésta no se realizó antes del 9 de noviembre.
La campaña había interpuesto un recurso en el que alegaba no había ninguna base legal para extender el plazo de identificación y que la secretaría de estado Kathy Boockvar se había extralimitado pues no tenía el poder para cambiar la fecha de forma unilateral.