• Fue galardonado por la Fundacíon Jack Kemp
MIAMI, 6 DE DICIEMBRE DE 2012, NHR.com–En la noche de ayer martes, el senador Marco Rubio y el congresista Paul Ryan fueron figuras centrales en la cena celebrada en el histórico Hotel Mayflower Renaissance, en Washington,D.C., donde Rubio recibió el galardón de liderazgo entregado por la Fundación Jack Kemp.
La ocasión le sirvió de escenario al joven republicano de la Florida para pronunciar un discurso sobre cómo levantar a la clase media, llamándola “la respuesta a los desafíos más apremiantes que enfrentamos”, mientras trataba de proyectar una nueva perspectiva para el Partido Republicano, que todavía está reponiéndose de las elecciones del mes pasado.
Observadores de la política nacional que acudieron al evento de anoche le señalaron a NHR,com que tanto Paul Ryan, como Marco Rubio, se lucieron en lo que podría calificarse como una competencia por ser el centro de atención, bajo la mirada de varios cientos de personas, más de dos docenas de reporteros y espectadores de C-SPAN.
Sobre Rubio, que desde que llegó a Washington ha dicho que lo único que desea es centrarse en el Senado y le restó importancia a convertirse en compañero de boleta de Mitt Romney, se afirma que al quedarse el Partido Republicano sin un líder claro y en busca de dirección, al parecer Rubio no cierra las puertas a una aspiración que lo llevaría a convertirse en primer mandatario de Estados Unidos.
Durante el evento de anoche, los discursos de Rubio y Ryan reflejaron su afán de distanciarse de la imagen que Romney dejó después de decir que la mitad del país es irremediablemente dependiente del gobierno, el desafortunado comentario del “47 por ciento”, hecho durante un evento privado para recaudar fondos en Boca Ratón, Florida.
Ambos se alejaron de la retórica partidista y trataron de proyectar una visión más optimista y abierta, con un fuerte enfoque en las familias de clase media.
“Algunos dicen que nuestro problema es que el pueblo estadounidense ha cambiado”, declaró Rubio. “Yo sigo convencido de que la inmensa mayoría de nuestro pueblo sólo quiere lo que mis padres tuvieron: una oportunidad”, afirmó.
Ryan, por su parte, declaró: “Tenemos que dejar de lado las consideraciones partidistas en favor de una mayor preocupación: ¿Cómo podemos trabajar juntos para reparar la economía? ¿Cómo podemos dar garantías reales y la posibilidad de ascender a todos los estadounidenses, especialmente a los necesitados?”
Al igual que Ryan, Rubio reconoció el papel del gobierno, incluida la regulación de los alimentos y la seguridad del medio ambiente, pero declaró que “el gran gobierno nunca ha funcionado”.
Rubio llamó a preservar el Medicare a través de la reforma y se refirió a la mejora del acceso a la educación, incluyendo la manera de dar a los estudiantes de bajos ingresos becas para asistir a escuelas privadas, y destacó su apoyo a leyes para facilitar que las familias comprendan el verdadero costo de la deuda universitaria.
Mientras que algunos republicanos dicen que están abiertos a aumentar los impuestos a los ricos, Rubio trazó una línea firme, y logró el aplauso de la audiencia.
“No se trata de proteger a los millonarios y multimillonarios. Para mí, se trata del hecho de que los aumentos de impuestos que (el Presidente) quiere, no le harían la menor mella a la deuda, pero perjudicarían a las empresas de la clase media y a las personas que trabajan para ellas”.
Por su parte, Ryan, con unas breves palabras, dejó entrever que podría también pensar en el 2016. “Perder es parte de la política, y con frecuencia puede preparar el camino para mayores victorias”, aseguró Ryan, quien parecía referirse a sus planes.