• Las promesas suenan bien pero no llegan a cristalizarse
MIAMI, 10 DE ABRIL DEL 2013, NHR.com—Analizando el nuevo proyecto del alcalde Carlos Giménez con los Miami Dolphins, observadores de la política condal señalan que le encuentran similitud con el negocio que hizo el entonces alcalde Alex Pénela con los Miami Heat, que hasta hoy los propietarios del equipo de básket no han dado ni un solo centavo al condado.
Para hacer un poco de historia en relación con los comentarios obtenidos, en NHR.com fuimos a los archivos en busca de las negociaciones que realizó Penelas con el propietario del Heat, Micky Arison, para la construcción de la American Airlines Arena donde juega ese equipo.
En el año 1997, Penelas firmó el acuerdo del controversial contrato con el Heat, y todavía, hasta el día de hoy, el condado aún no se ha visto beneficiado compartiendo las ganancias que auguró Arison.
Con el fin de que el equipo se quedara en Miami, el condado y el entonces alcalde Alex Pénelas acordaron regalarle al Heat $38 millones de dólares, que era el valor de las tierras públicas privilegiadas donde se construyó la AAArena frente a la bahia.
El equipo pagó $240 millones para la construcción de la arena, pero al mismo tiempo el Heat recibió una subvención anual de $6.4 millones para las operaciones de la arena por los próximos 30 años, que es lo mismo que $192 millones del dinero de los fondos de los contribuyentes.
La corporación Basketball Properties Ltd, dueña del equipo, se comprometió a compartir el 40% de los beneficios a partir de los $14 millones, quiere decir que si el Miami Heat en un año tiene ganancias de $20 millones deben entregarle al condado el 40% de $5 millones; “un negocio redondo, pero para el dueño”, nos dijo una fuente contactada al respecto.
Hasta la fecha, según la administración del Heat, el equipo nunca ha alcanzado el numero mágico de $14 millones, ni siquiera en la ultima temporada en la que el Heat se coronó campeón mundial.
Ahora, la negociación con el Miami Dolphins tiene matices que recuerdan el negocio con el Heat. Dolphins recibiría $7.5 millones anuales en impuestos para renovar el estadio Sun Life bajo el acuerdo hecho por el alcalde Carlos Giménez con el equipo.
Entre los términos realizados por Giménez y el presidente de los Dolphins, Mike Dee, está que Miami-Dade aumentaría sus impuestos hoteleros en territorio continental de un 6 a un 7 por ciento, y le daría a los Dolphins un 75 por ciento del nuevo ingreso hasta $7.5 millones anuales en el primer año. Cada año, el límite de los dólares aumentaría un 3 por ciento. El desembolso expiraría en 26 años.
Al final de 30 años, los Dolphins devolverían entre $110 y $120 millones al condado, y la pregunta que todos se hacen es si los Dolphins tendrán los $120 millones para dárselos al condado dentro de 30 años, si la negociación se lleva a cabo tal como acordó el alcalde Giménez.
De todas maneras, existen cláusulas en el contrato en la que los Dolphins pagarían hasta $120 millones en penalidades si no llegan a traer una serie de eventos deportivos importantes a Sun Life Stadium durante los próximos 30 años, incluyendo cuatro Super Bowls y un campeonato nacional universitario de football.
Al mismo tiempo el dueño del equipo, Stephen Ross, supuestamente pagaría altas penalidades si vende los Dolphins durante los próximos cinco años, y también firmarán un acuerdo de 30 años para no dejar Miami-Dade.
La negociación debe someterse a un referendo en todo el condado en el mes de mayo próximo.