MIAMI 3 DE OCTUBRE DE 2024, NHR.COM—Mientras el FBI construía su caso contra los hombres que sospechaban que habían sido contratados por el prominente desarrollador inmobiliario del sur de Florida Sergio Pino para asesinar a su esposa, uno de los hombres aceptó el pasado mes de julio cooperar, haciendo una llamada grabada al hombre que dijo que lo había reclutado para formar lo que el FBI llamó uno de los dos “equipos de asesinos”.
Avery Bivins había conocido al hombre al que debía llamar por sugerencia del FBI mientras ambos cumplían condenas en una prisión estatal de Florida: Bivins por intento de asesinato y robo a mano armada.
El objetivo de su llamada controlada, Fausto Villar, había cumplido condena por robo a mano armada. “Va a estar bien, todo va a salir bien”, le dice Bivins. “Salir bien. Pero el maldito humo tiene que despejarse”, responde Villar. “Todo tiene que despejarse, el humo tiene que despejarse. Así que con lo que tienes, intenta defenderte”.
Pero era demasiado tarde para que Bivins se defendiera de los federales. La llamada ocurrida el 15 de julio fue un punto de inflexión en la investigación, ya que a la mañana siguiente los equipos de arrestos del FBI se movilizaron para arrestar a Villar y Pino, quien, según la Fiscalía de los Estados Unidos, evitó los cargos de asesinato por encargo solo porque se disparó en la cabeza.
Pino y Villar estaban conectados a través de la empresa de techado de la esposa de Villar, que estaba trabajando en la casa de los Pino frente al mar de Coral Gables, valorada en 8 millones de dólares.
El FBI alega que Pino le encomendó una tarea muy diferente: organizar el asesinato de la esposa de Pino durante 30 años, Tatiana.
En la llamada del 15 de julio, Villar parece preocupado, sabiendo que los federales ya estaban tras el complot, ya que varias de las nueve personas finalmente acusadas habían sido arrestadas. Y Pino pasaría ese día modificando los lucrativos acuerdos de fideicomiso que había establecido por primera vez en marzo cuando ejecutó su último testamento, el mismo día en que uno de los hombres que supuestamente contrató para matar a su esposa fue arrestado. Bivins, sabiendo que el nudo se estaba estrechando alrededor de los conspiradores, hizo que su abogado ofreciera su cooperación al FBI, dijo el abogado de Villar durante la audiencia de detención del 9 de agosto donde se reprodujo la llamada.
Una grabación del procedimiento de casi dos horas de duración se hizo público ayer miércoles. En ella, está claro que Villar sabía que algunos miembros de la banda de Bivins estaban detenidos y está preocupado por posibles cargos de conspiración.
“¿Por qué lo harías, si te atrapan, van a tener que, ahora esto se convierte en una conspiración”, le dice Villar a Bivins? “Ahora no puedes librarte de la culpa. Tus dos muchachos ahora, o quienesquiera que sean, pueden librarse de la culpa”.
Parece preocupado de que Bivins sea el próximo en ser arrestado. “Deberías borrar tu ‘Instagram. Borra tu ‘Instagram”, le dice a Bivins, preocupado por su rastro electrónico. “Borra, borra. Haz eso por mí, borra eso”.
Villar quería ser liberado antes del juicio, pero el gobierno argumentó con éxito que era demasiado riesgo de fuga y peligro para la comunidad, y señaló que en un momento de la llamada Villar le dice a Bivins “No voy a volver a la cárcel”. Villar ya le había pagado a Bivins $75,000 después de que Bivins aceptara el contrato de $150,000 para asesinar a Tatiana, con una bonificación de $150,000 si el hecho se hacía sin ser detectado, según la denuncia del FBI.
Los Pinos no son mencionados por su nombre en la llamada, pero el fiscal le dijo al tribunal que Villar lo mencionó.
En un momento, le dice a Bivins que eventualmente recibiría más dinero, si las cosas iban bien para ellos: “Entonces, al final del día, cuando todo esté dicho y hecho, estoy seguro de que habrá un pequeño regalo para mí y, por ejemplo, para todos ustedes.
En caso de que las cosas no salieran bien, Villar dijo: “Necesitamos un plan en el que, digamos, Dios no lo quiera, llaman a tu puerta un día o como sea el caso, alguien tiene que avisarme por aquí, como un código o algo así”.
Bivins, Villar y otros siete hombres han sido acusados desde entonces en el supuesto complot de asesinato a sueldo o en un intento anterior de acechar y cometer un incendio provocado contra Tatiana o su familia.
Todos están detenidos antes del juicio y se han declarado inocentes. Un abogado de Pino dice que él también había negado su participación.
En cuanto al motivo, Bivins le dijo más tarde al FBI algo que según Villar le dijo Sergio Pino: Tatiana había rechazado la oferta de divorcio de Sergio de 20 millones de dólares.
Los estados financieros presentados en una declaración de Sergio en un caso de divorcio sitúan el patrimonio neto de la pareja en 2022 en más de 153 millones de dólares y hasta 359 millones de dólares. Aunque algunas fuentes vinculadas a la investigación, han dicho que Pino no tenia tanto dinero como se ha especulado.
El 23 de junio, uno de los hombres que Bivins supuestamente reclutó para lo que el FBI llama el segundo “equipo de asesinos” se enfrentó a Tatiana afuera de su casa de Pinecrest con un arma de fuego, pero nunca disparó mientras ella huía en su auto hacia la entrada trasera y corría hacia su casa, según el FBI.
En la llamada del 15 de julio, Villar dijo que Pino sabía que el FBI lo estaba monitoreando, por lo que, le dijo a Bivins, no podía sacarle más dinero en ese momento.
Después de la llamada, el teléfono celular de Pino recibió una llamada de WhatsApp de Villar y los dos hombres intercambiaron mensajes de WhatsApp, según la denuncia contra Villar.
Después de la llamada, el teléfono celular de Pino recibió una llamada de WhatsApp de Villar y los dos hombres intercambiaron mensajes de WhatsApp, según la denuncia contra Villar.
Hablaron durante 3 minutos y 15 segundos, y ahora solo Villar conoce el contenido de la llamada, ya que el suicidio de Pino puso fin al caso en su contra.
